La emergencia climática que vivimos en la actualidad es uno de los principales signos visibles de la crisis socio-ambiental generada por el modelo de desarrollo socioeconómico que rige el mundo y que no parece el adecuado, ya que genera desigualdades y conflictos entre las personas y los pueblos, a la vez que degrada el medio ambiente y las funciones naturales de las que dependemos. La mayor parte de los gobiernos del mundo han reconocido esta crisis como problema real y han incluido medidas importantes en sus políticas, aunque no suficientes. Las soluciones a esta crisis se tienen que buscar desde planteamientos y puntos de vista diferentes a los que la han creado y es por ello que debemos aprender a ver el mundo desde otra perspectiva, una perspectiva que haga posible la sostenibilidad. La sostenibilidad es un metaconcepto, un enfoque vital o predisposición ante la vida y precisa de sociedades capacitadas para resolver problemas, aprovechar oportunidades y crear perspectivas mediante el compromiso activo.
En las tres últimas décadas, el desarrollo sostenible se ha promovido por las Naciones Unidas a partir de acciones globales como la Agenda 21 (promulgada en Río de Janeiro en 1992), los Objetivos de Desarrollo del Milenio (fijados en el año 2000) y la Agenda 2030, a través de diecisiete objetivos de desarrollo sostenible (2015). En el campo de la educación, la Educación para el Desarrollo Sostenible (EDS) apareció como un nuevo paradigma que pretende reformar la Educación y la escuela, ya que se entiende que se necesita una metamorfosis de lo que se aprende y cómo se aprende. La UNESCO, a través de iniciativas como la Década de la EDS (2005-2014) ha intentado propiciar cambios en los sistemas educativos de los diferentes estados, así como introducir debates en las distintas disciplinas. Educar para la sostenibilidad desde la geografía implica un tipo de enseñanza y aprendizaje distinto, basado principalmente en habilidades vinculadas a la acción para la resolución de problemas, así como para la creación de escenarios futuros sostenibles.
La temática principal del congreso pretende reflexionar sobre cómo enseñamos y qué aprenden nuestros alumnos sobre geografía, de manera que ayudemos a la creación de un mundo sostenible. La temática principal incluye las siguientes líneas:
En esta línea temática se pretende abordar la sostenibilización curricular a diferentes niveles, para conocer las oportunidades, los obstáculos y las contribuciones de la administración y el profesorado mediante:
En 2015, las Naciones Unidas promulgaron la Agenda 2030 a través de diecisiete Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). Esta línea pretende reunir experiencias y propuestas innovadoras en didáctica de la geografía que contribuyan a la consecución de los ODS y, sobre todo, al objetivo 13 que establece la acción por el clima. El congreso dará una importancia preeminente a las acciones educativas transformadoras que se centren en el cambio climático a partir de trabajar y capacitar para la resiliencia, la mitigación y la adaptación.
¿Qué entendemos por ciudadanía global sostenible y cómo ésta puede promover el cambio social? ¿Cómo se puede contribuir a su formación desde la educación geográfica? En esta línea temática se pretende reflexionar y ahondar sobre las competencias de una ciudadanía global sostenible, que incluyan como principios básicos la acción responsable y la contribución al bien común, a diferentes escalas.
En esta línea temática se pretende utilizar el paisaje como instrumento interdisciplinar para visualizar la forma que adquiere la sostenibilidad en distintos contextos geográficos. La línea temática da cabida a aquellas propuestas didácticas centradas en una educación para el futuro que es integradora, propositiva y creativa. Nos referimos a estrategias didácticas que promueven la identificación, el análisis, la evaluación de alternativas y la creación de paisajes sostenibles.
El congreso también contará con espacios de debate sobre las siguientes temáticas clásicas de la didáctica de la geografía:
El realismo social ha puesto de manifiesto que debemos mejorar la calidad del conocimiento geográfico que se ofrece a los alumnos en la escuela, y al profesorado en su formación inicial. Esta línea temática pretende recoger reflexiones e investigaciones sobre qué entendemos por conocimiento geográfico poderoso y cómo identificarlo y/o concretarlo. Otras investigaciones en esta línea temática incluyen el análisis del currículum escolar y de los planes de estudio en la formación inicial del profesorado de educación primaria y secundaria, así como el análisis de libros de texto.
En esta línea temática tienen cabida propuestas metodológicas innovadoras en la enseñanza y aprendizaje, centradas en conceptos y habilidades geográficas en diferentes niveles educativos, así como de las investigaciones sobre el aprendizaje y el cambio conceptual que nos ayude a la mejora de la didáctica de nuestro conocimiento disciplinar.
Las tecnologías digitales aportan recursos y estrategias que aumentan las posibilidades y mejoran la experiencia de la educación geográfica. Esta línea temática pretende explorar en los ámbitos siguientes:
En esta línea temática tendrá cabida la relevancia de las salidas, el trabajo de campo y la creación de itinerarios en la enseñanza y aprendizaje de la geografía y en la educación del paisaje.